Comer sano

El fin de semana pasado un cliente nos comentó que le extrañaba mucho que no hubiese una cola permanente en nuestra tienda: «la comida está buenísima, los productos de calidad, cada vez que entro huele de maravilla, todo está muy limpio y cuidado, la relación calidad/precio inmejorable, el trato más amable imposible, no llego a entender que en estos meses haya bajado tanto la venta en A Tavola cómo me comentas…»

Así es, aunque no haya que sorprenderse tanto. Casi todas las actividades, que no sean venta de mascarillas, mamparas y geles desinfectante, supermercados… todos los demás hemos y seguimos sufriendo. Todos los demás hemos sido perjudicados por este tsunami social, sanitario, económico que nos ha caído encima.

Hemos visto con pena amigos que han tenido que echar el cierre a su actividad, por la que habían luchado hasta lo inimaginable, cuando no arruinados personalmente, porqué creían en un proyecto que merecía la pena ser sostenido.

Tenemos un número de cliente que nos apoyan, que nos conocen desde hace casi 4 años, y siempre se añaden nuevos, que nos descubren, a menudo por el boca a boca.

Pero también es cierto que el clima que se respira empuja a algunos, equivocadamente, a no venir a la tienda. Por miedo, injustificado: todo el proceso es extremadamente cuidadoso y no hay riesgos de infección. Mucho menor, sin duda, que ir a la compra en cualquier grande superficie. Habrá otras razones. Obviamente nosotros creemos que ninguna tiene razón de ser. Pero así están las cosas.

El querido cliente que nos animó muchísimo con su comentario añadió una impresión personal de poca sensibilidad y atención, en general, a la calidad de la comida. Quizás tenga razón. En los medios de comunicación, en los foros de alimentación y salud, se insiste mucho sobre lo mal que se come.

Nosotros nos mantendremos firmes, siempre, en la elección que hicimos desde el minuto cero. Nuestro nicho de mercado elegido es el que incluye personas que aman comer bien, sano, gustoso y saben que la salud riñe con productos de escasa y pésima calidad, monosabor a base de adictivos o ningún sabor por lo general, excesivamente baratos, llenos de engaños para el consumidor. Allí no caeremos nunca. Antes de eso se cierra.

Preferimos cocinar menos platos, no ofrecer un expositor cargado de 40 bandejas de delicias, que esperaban a que llegara el cliente sin reserva, y que siempre llegaba numeroso, en los buenos tiempos, antes de marzo, para entendernos. Pero aunque sea meno surtido, todo lo que encontraréis en A Tavola será de buenísima calidad. Es una garantía, una seguridad.

Por supuesto, tampoco esta forma de trabajar la hemos cambiado, si queréis garantizaros un plato, llamadnos el día antes de recogerlo en tienda y os lo prepararemos, con la calidad que es muestro lema y certificado de garantía.

Gracias a todos los clientes que nos sostienen apreciando nuestra comida deliciosa para llevar. Os esperamos también y como siempre este fin de semana, de viernes a domingo de 12 a 15 horas. Empezamos a cocinar las reservas recibidas, muy pronto por la mañana. ¡Llamadnos!